40 AÑOS DEL ACCIDENTE DE LOS RODEOS (TENERIFE)
Hace unos días, concretamente el 27 de Marzo, se cumplían los 40 años de uno de los accidentes de aviación más importantes en toda la vida de la aeronáutica.
Ocurrió en el aeropuerto de Los Rodeos, en Tenerife muy próximo a la ciudad Universitaria de La Laguna. Y, añado este último dato, porque era donde yo, en esa misma época estaba cursando mis estudios de medicina, así que, se puede decir, que casi lo viví en primera persona.
Todavía recuerdo que aquel domingo 27 de Marzo, me encontraba en la playa de Tabaiba con el que, un tiempo después, sería mi marido. A media tarde comenzamos a subir hacia la autopista para coger la guagua (autobús) que nos llevaría de nuevo a nuestras respectivas residencias universitarias en La Laguna. Mientras esperábamos a que llegara el transporte observamos como una gran columna de humo negro se dibujaba en el cielo y nos extrañamos ya que parecía que algo bastante grave había tenido que ocurrir para verse desde allí esa lejana humareda.
Llegando ya a La Laguna volvimos a extrañarnos al ver a mucha gente corriendo por la calles. Lo cierto es que, de entrada pensamos en una carga policial por alguna manifestación, corrían tiempos revueltos y los enfrentamientos entre estudiantes y policía eran el pan nuestro de cada día. Pero, poco a poco, los rumores se estaban propagando y pronto supimos que una grave catástrofe había ocurrido en el aeropuerto. Y, hacia allí nos dirigimos pues ambos éramos estudiantes de medicina y, quizás, pudiéramos ayudar en algo.
Las imágenes que vimos desde “cabecera de pista” eran dantescas y nunca, nunca, se han borrado de mi memoria. Los restos esparcidos del fuselaje del PanAm y el KLM, dos BOEING 747, uno de los mayores aviones del mundo, hablaban de dolor, angustia y muerte. El humo, por momentos, cubría toda la pista evitándonos ver tamaña desgracia aunque no por eso, dejábamos de sentirla en los huesos. Terrible…parecían dos grandes monstruos heridos de muerte que solo podían gemir elevando hacia el cielo desgarradores aullidos metálicos. Y, entre medias, entre medias, otros gemidos menos audibles pero no por eso menos dolorosos….llantos, quejidos y confusión llegaban de los pocos supervivientes todavía en la pista…..Estremecedor y horrible….
Pero ¿qué y cómo, ocurrió?...En los accidentes de aviación siempre se dice que un solo elemento no es el desencadenante de una tragedia, siempre se habla de una cadena de sucesos que llevan a ese trágico final y, como no, lo mismo ocurrió aquella fatídica tarde de domingo en Tenerife. Pero empezó gestándose desde bastantes horas antes de que ocurriera el accidente…
Antonio Cubillo y el MPAIAC (Movimiento por la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario) iban a propiciar el primer acontecimiento que desencadeno la tragedia.
Pasadas las 12:20 horas, en el aeropuerto de la otra isla capitalina de Canarias, Gran Canaria, a solo 30 minutos en avión de Tenerife, una voz anónima, joven y masculina llama a la centralita de las oficinas de Iberia. La empleada que cogió la llamada se quedó paralizada. No sabía qué hacer. Le acababan de anunciar que iban a estallar dos bombas en las dependencias del aeropuerto de Gando. Apenas unos minutos después, sobre las 12:30, sin tiempo para que las fuerzas de seguridad se desplegaran, estalla un primer artefacto en una floristería situada en la terminal.
A los agentes de la Policía Armada -ahora Policía Nacional- y la Guardia Civil se unen unidades especiales del Ejército, que buscan el segundo explosivo que había anunciado el comunicante anónimo. No aparece pero el temor a que se vuelvan a producir más explosiones lleva a las autoridades a ordenar el cierre total del aeropuerto de Gando y desvío de los vuelos que tenían previsto aterrizar en Gran Canaria. Entre ellos hay dos Jumbos en pleno vuelo: uno de KLM procedente de Amsterdam y con destino a Las Palmas y otro de Pan American que partió de Los Ángeles con destino a Grecia, con escala también en Las Palmas.
La decisión altera completamente los planes de ambos Boeing 747. Sin embargo, quienes peor se lo toman son los dos únicos controladores aéreos que había ese domingo en la torre del aeropuerto tinerfeño de Los Rodeos. De repente, de una jornada tranquila pasan a una de stres total.
Hay que recordar que Los rodeos era y sigue siendo un aeropuerto pequeño y con no demasiado tráfico y menos de esos “Heavys” de la aviación (así se conocen esos grandes “pájaros” en el argot de la aviación). Bien pues, ese aeropuerto tenía muy difícil hacerse cargo del volumen de tráfico que suponía el desvió por el cierre del aeropuerto de las palmas. Primer punto negativo.
En Los Rodeos además, se dan unas condiciones climáticas particulares que hacen que en algunas épocas del año se posen las nubes. La altitud del aeropuerto, a poco más de 600 metros sobre el nivel del mar, hace que se den dos tipos de fenómenos. Por un lado, los vientos alisios empujan masas de aire húmedo y nubosidad, que se va estancando en este punto. Además, las características orográficas de Los Rodeos, que forma un anillo montañoso, hacen que la nubosidad "no se renueve" y se acumule. Segundo punto negativo.
Niebla y Congestión en Los Rodeos en la tarde del domingo 27 de marzo de 1977. En la cabina del Boeing 747 de KLM se escuchan las instrucciones que los controladores van dando a los aviones que abarrotan sus instalaciones, tras haberse visto forzados a acoger a casi todo el tráfico aéreo de Canarias, porque una bomba del movimiento independentista MPAIAC ha obligado hace horas a cerrar el aeropuerto de Gran Canaria.
El comadante Jacob Veldhuyzen Van Zante del KLM,lleva hora varado en el aeropuerto a punto de sobrepasar las horas de vuelo establecidas y decide repostar combustible antes de volver al aire con destino a Las Palmas y de vuelta a Amsterdam. Los minutos pasan y las condiciones meteorológicas empeoran. Situado a 600 metros de altitud, el aeropuerto de Los Rodeos (el único de la isla en esa fecha) se ve afectado muchos días por una niebla que en realidad no es tal, sino algo peor, más imprevisible: nubes que cruzan sobre Tenerife a esa altitud y que en solo unos minutos pueden reducir a cero el campo de visión de los pilotos. Es uno de esos días.
Pero el aeropuerto está totalmente saturado de tráfico y los controladores, a pesar de que la niebla reduce la visibilidad a poco más de 300 mts, deben descongestionarlo y comienzan a dar salida a algunos vuelos.
Varios aviones comienzan a rodar por la pista para ir saliendo. Un controlador informa que las luces de pista no funcionan, pero, aun así, se sigue adelante. Tercer punto negativo.
Tanto el KLM 4805 como el PanAm 1736 están entre los “afortunados” que despegaran en breve. Los pilotos van pidiendo permisos a la torre. La maniobra es comprometida, porque los aviones ruedan por turnos sobre la pista principal hacia la cabecera, hasta recibir la confirmación de que la pista está libre y puede girar por completo y despegar. Además, la niebla lo dificulta todo y al PamAm 1736 le cuesta hallar la salida que le han asignado para abandonar la pista. De hecho, se confunde.
El piloto del KLM está listo para despegar, sólo a la espera de recibir la confirmación de la torre….el PanAm sigue rodando en la misma pista por donde despegara en breve el KLM, sin encontrar la salida…
El KLM recibe instrucciones de la torre…”, de acuerdo, NO DESPEGUE, le avisaremos en breve”…….Y, en ese momento ocurre el cuarto y definitivo punto negativo que desemboca en la gran tragedia…Las conversaciones entre varios aviones de la torre de control se solapan y el KLM entiende que tiene permiso para despegar cuando el Panma todavía está en pista
Es el PamAm pidiendo hablar con la torre: "Clipper 1736", dice. "1736, reporte la pista libre", le responde la torre. "De acuerdo, reportaré cuando la dejemos libre", confirma el avión americano, sin saber qué hace ya 20 segundos que el KLM se dirige hacia él. El KLM está acelerando en pleno despegue y por la radio se oye al segundo piloto de PanAm, Robert Bragg: "Nosotros todavía estamos rodando por la pista, Clipper 1736" "¿Entonces no está fuera?", dice el ingeniero del Boeing de KLM, alarmado. Pero el comandante le responde a su ingeniero que sí, que el PanAm está fuera de la pista y sigue con la carrera de despegue.
Nueve segundos antes de la colisión en el KLM ven que van directos hacia el PanAm que sigue en pista e intentan despegar aunque todavía no llevan velocidad suficiente….el KLM levanta el morro pero no lo suficiente e impacta contra la parte superior del PanAm.
El avión de KLM se estrella contra el suelo y se incendia. Ninguno de sus 248 ocupantes sobrevive. El Boeing de Pan Am sufre gravísimos daños y también es pasto del fuego, pero más de 70 de sus 396 ocupantes escapan del fuego, la mayoría gracias a un agujero en el fuselaje….
La tragedia está servida y el dolor, la angustia y la muerte sobrevuelan el aeropuerto de Los Rodeos como si de un avión fantasma se tratara…
Estos son algunos de los datos y puntos negativos o casualidades, aunque yo las llamaría “causalidades”, que se interconectaron para dar lugar al mayor accidente ocurrido tanto hasta esa fecha como hasta la actualidad.
Pero también hay otros pequeños y curiosos datos que no podemos dejar de aportar. Pequeños y curioso datos con visos de misterio y extrañas coincidencias que poco a poco fueron saliendo a la luz con el paso del tiempo.
Aquí van algunos ejemplos…
Días antes, en una universidad estadounidense se propuso a los estudiantes que averiguaran cuál iba a ser las portadas de los periódicos el día 29. Las propuestas se guardarían bajo llave hasta dicho día. Al abrir, descubrieron que la propuesta de uno de los estudiantes hablaba del choque de dos aviones y un gran número de fallecido. Acertó.
También la médium Marilyn Rossner tuvo unas extrañas visiones de unos aviones colisionando y una fuerte voz que le decía “Tenerife”, “Tenerife”.
La única superviviente del avión holandés (KLM) fue una azafata que, de repente, sintió que no debía volver a subir a su avión y se quedó en tierra. Gracias a ello, a esa “intuición”, logro salvar su vida.
Semanas después del accidente, empezó a circular el rumor de que, durante la ardua tarea de recuperación e identificación de los restos humanos, nunca apareció el de una niña (o el de un niño, según la versión). Para cuando se desmintió el bulo, ya era tarde. Se había desatado la leyenda negra. Pero lo más curioso, es que hay elementos que hacen pensar en que, a pesar de que no faltan cuerpos por recuperar, probablemente el espíritu de una niña se encuentre vagando por la zona...incluso hoy día. Y su presencia se intensificaba en una de las garitas militares del aeropuerto.
Un soldado que, por aquel entonces, estaba destinado en dichas instalaciones fue testigo de la aparición de una niña que se presentó delante de la garita donde hacia guardia aquella noche ,cruzó de un lado a otro y desapareció….si no era un fantasma…¿Qué hacía aquella niña vagando por el aeropuerto a las 5 de la madrugada?
El soldado empezó a notar cierta ansiedad. Abandonó su puesto en la garita junto a su arma reglamentaria. Se llegó a alejar de su puesto unos cien metros en busca del niño. No vio ni rastro. Volvió a la garita, con un gran malestar y llamó a través del teléfono al puesto de guardia. Al momento se personó en la garita un Land Rover con un cabo y dos soldados. Al entrar en el puesto de vigilancia se encontraron a nuestro testigo en el suelo, víctima de una lipotimia. El cabo se asustó al ver el rostro descompuesto del muchacho.
Al día siguiente, el soldado es llamado para reunirse en un despacho de esta base militar con un alto mando para dar parte de lo ocurrido. En la habitación había otro personaje que le llamó la atención. Un tipo, de paisano, sin credenciales, que no se le identificó en ningún momento, lo que a todas luces es impensable en unas instalaciones militares. Este individuo no paraba de tomar notas.
Se resolvió que el protagonista de nuestra historia se tomara unas vacaciones forzosas y, eso sí, que no hablara con nadie de lo ocurrido.
En el año 2004 “La niña” hizo otra aparición, esta vez en la zona de Las Raíces, muy próxima al aeropuerto de Los Rodeos.
Y ahora, un poco de conspiración para rematar la larga lista de casualidades y coincidencias en ese terrible suceso... Unos seis meses después, cuando parecía que todo lo relativo a la tragedia aérea estaba ya explicado, se empezó a divulgar un aspecto del accidente bastante extraño, que, ciertamente, pasó desapercibido entre la opinión pública. La voz de alarma la dio el químico Agustín Cabrera, y la información fue recogida en los medios por el periodista Andrés Chaves: ¡se habían detectado restos de uranio empobrecido entre los amasijos del Boeing!
La explicación que se dio es que estas “barras” de uranio empobrecido iban en las alas para, de esta manera, darle más estabilidad al avión durante el vuelo. ¿Qué problema había entonces con ese uranio empobrecido?
El problema radica en que, a determinadas temperaturas, el uranio, altamente tóxico para los seres humanos, se descompone y queda en el aire por lo cual, supervivientes, bomberos, policías y demás personal que se encontraba en la pista esa trágica tarde pudo perfectamente inhalar parte de ese uranio empobrecido y provocar en ellos, a lo largo del tiempo, graves enfermedades probablemente pulmonares.
Nadie avisó, nadie dijo nada, todo se calló y se ocultó…..
Y, ya por último, un pequeño apunte vinculado, esta vez, al fenómeno Ovni.
A nadie que le interese el fenómeno ovni se le escapa que Canarias es lo que podríamos llamar una zona caliente o una zona “filtro” de Ovnis y, por supuesto estos no podían faltar en la tragedia de Los Rodeos. Muchos fueron los que hablaron de avistamientos por aquellas fechas, de Ovnis…como quien estudia el accidente, como quien “se preocupa” por lo ocurrido, los Ovnis hicieron acto de presencia en días y lugares cercanos. Y hay quien dice que, en un momento determinado, muy poco tiempo después de la catástrofe una extraña y luminosa niebla se situó precisamente sobre el hangar donde se estaba llevando a cabo la ardua tarea de reconocer los cuerpos, hay quien dice que una extraña energía procedente de esa niebla llenó el lugar y muchos opinan que los Ovnis estaban detrás de esa rara nube situada sobre Los Rodeos….
Podría seguir durante mucho más tiempo contando anécdotas misteriosas y curiosas que ocurrieron poco después del accidente, pero creo que ha quedado bastante claro que las “extrañas coincidencias”, las “intuiciones”, “los fantasmas” e incluso los Ovnis, se dieron cita aquel trágico dia de Marzo de 1977 y posteriores a la gran catástrofe aeronáutica que, por desgracia, marcaría un antes y un después en la historia de la aviación.
Fuente: lainformacion.com

